Torah para Vivir

Torah para Vivir

8 ago 2012

Mi historia personal 1


BS"D




Pobrecita...
Yo? Por qué?!
Tantos talentos... y ahora tienes que dejarlos de lado...
Miré  a la Rabanit, que en verdad estaba angustiada por mi futuro y le dije:
Si Di-s me ha dado talentos y gran cantidad de años de experiencia para desarrollarlos, acaso suponemos que el TodoPoderoso desea que yo guarde todo eso en un cajón?
La Rabanit me miró con piedad, (por ella y por mí) y alzó los hombros...
Hacía pocos años que yo había cruzado la línea invisible que divide a los judíos no observantes de los retornantes al camino de Torah Y Mitzvot, los baalei Teshuvá... En ese cruce creí que sólo tenía que dejar de cantar tangos, y comenzar a cantar canciones de Alabanza, o de Plegarias, y que pronto estaría haciendo lo que mi esencia vino a hacer... Di-s se sonrió al escuchar la ingenuidad de mi corazón y dijo (sin que aún yo lo pudiera escuchar)  "Tengo otros planes para tí..."
Había intentado cantar, escribir, y algunas otras cosas y me encontré con un mundo "religioso" temeroso y lleno de prejuicios sobre cualquier expresión  (artística), que no fuera "lo que nosotros hacemos".
Al principio, acepté los condicionamientos que me imponían si quería cantar o hacer algo artístico en la "comunidad". "Estas canciones sí, estas no, este movimiento sí, estas palabras no, etc. etc".
Para un Alma rebelde como la mía era una doma difícil de digerir.
Pero yo quería servir a Di-s, había descubierto la Torah y aquellos que se me presentaban como los "dueños de la Torah", que habían nacido en una cuna religiosa, me miraban con recelo y desconfianzan (y tenían razón), así que intenté con todas mis fuerzas, bajar el copete, bajar el nivel artístico, amoldarme a los cuatro tefajim de expresión artística que me autorizaban manifestar y empezar de "nuevo".
Tardé muchos años y muchas lágrimas hasta escuchar a Di-s hablando dentro mío, diciéndome que yo tenía que hacer algo propio, hacer florecer algo que Él había sembrado en mí...
Y lo intenté, con todas mis fuerzas, y con todas las  alegrías y frustraciones que acumulé en el camino.
Creo que Di-s ha puesto en cada uno de nosotros una llama de Luz que puede iluminar más allá de muchos cuadriculados horizontes hechos de plástico y costumbre.
Pero sólo con fe, con fidelidad a nuestro Socio, uno puede intentar sacarla a la intemperie.
En estos años he intentado transmitir este camino de Torah y Mitzvot con la libertad que Di-s nos "arma". Muchos fueron los curiosos, pero la lucha es solitaria, y muchas veces, oscura y sin aparente sentido...
No todos están dispuestos a quebrar sus propios límites.
Yo he sufrido ataques de pánico y depresiones, y he salido de allí sin medicamentos, con la Plegaria, y la asistencia de los Tzadikim, con el estudio de Torah y el refinamiento constante.
Sigo cargando en mi mochila infinitos proyectos, algunos maduros y otros recién nacidos, y con muchas mudas de ropa, que he tenido que cambiar porque se habían deshecho con lágrimas de impotencia y soledad. También guardo las palabras de afecto y las sonrisas de aquellos que me acompañaron en algún tramo del viaje, y que sin despedidas, volamos hacia diferentes direcciones...
Trato de alivianar el peso empequeñeciendo los recuerdos de los que me traicionaron.
Y sigo andando, experimentado expresiones de mi Alma que ni sospechaba que estaban aquí, en mi corazón...
Sabiendo que el "Director" tiene un plan para cada actor, para cada escenografía y para cada diminuto objeto de utilería que nos ha dado para las escenas de nuestra vida...
Sé que las canciones que he compuesto, la voz que he encontrado y educado, el guión cinematográfico que he escrito, las obras y discos para niños, los proyectos para difundir Torah con Alegría, y los infinitos sueños que he tenido y que perduran latiendo en mi cabeza, tienen un momento para salir y manifestar la luz de Di-s... Tal vez, como se dice de la revelación de Mashiaj, también la revelación de lo que vinimos a hacer, suceda en un abrir y cerrar los ojos... Que sea hoy, con bondad y misericordia Divina, Amén.

Patriicia Dvorah Starkloff

2 comentarios:

Irit dijo...

No lo puedo creer, me conmueve tu relato.

Patriicia Deborah Starkloff dijo...

BS" D
Gracias Irit
Una amiga de aquellas épocas donde comenzábamos a "hacer camino"
Gracias por tu sensibilidad, la de aquellos días, y la de hoy.
Aún nos quedan muchas sonrisas y buenas noticias para compartir...
Los senderos que trazamos se ven distintos... pero el afecto, el verdadero cariño, sigue intacto.
Un beso
Patriicia (Dvorah)